Me rindo

Cada vez que me dejé llevar por la emoción, caí rendida en la batalla. Perdí un trozo de mi corazón.

Será que nunca escogí el compañero indicado o que no supe bien cual era mi papel en esta guerra que me tiene rota y hundida...no puedo más...saco la bandera blanca que se hallaba escondida en la retaguardia de mi inocencia, pensando que hacía mal si se rendía...

Pero ya no puedo más, siento cómo me voy desangrando y que cada vez es más grande el agujero que brota de la herida. No puedo más...

Me rindo, me muero, suspiro, me siento sola, desorientada y perdida. Mi alma necesita la Paz que poco sabe de amar, de entregar, de luchar por causas perdidas. Dame muerte en este instante, pues el dolor cada vez es más grande, más intenso y más constante. No quiero que me llamen cobarde por no saber amar, pero tampoco quiero perder mi vida buscando a alguien que acepte lo que tengo para dar. Y si nadie lo quiere, denme mi merecida muerte y déjenme descansar. 

Ya no quiero ni tengo fuerzas para mantener en pie un cuerpo en el que no hay a quien cobijo dar. Ya no quiero besar labios lastimeros traicioneros de lenguas inquietas que no saben dónde se han de posar...ya no quiero, ya no puedo más.